sábado, 12 de abril de 2014

Depende de todos.


Llegó la hora de la verdad. Con seis partidos de Liga por delante, uno de Copa y otros dos o tres en Champions League, el Real Madrid se presenta a estas alturas de temporadas con opciones reales en las tres competiciones, algo que ni los más viejos del lugar recordábamos.

Lejos han quedado esos tiempos en que desde España presumíamos de tener a los dos mejores equipos del mundo, Real Madrid y FC Barcelona que aunque luego no obtuviesen los títulos en disputa, los presupuestos de ambos hacían que el resto de los equipos viesen inviable meterle el diente a estas presas. Ahora vemos como a semifinales de Liga de Campeones se presentan cuatro equipos y tres de ellos Atlético Madrid, Bayern Munich y Chelsea con la sensación de bloque como mayor seña de entidad y luego está nuestro Madrid, que ha realizado una temporada muy regular, pero que en varios de los grandes partidos, no ha dado la talla.

Desde el sorteo de ayer, todo el mundo del fútbol da como favorito al Bayern Munich en la eliminatoria contra el Real Madrid, pero os diré una cosa, me gusta que nuestro equipo no vaya de favorito (aunque con el presupuesto que tenemos mande cojones). Los éxitos del conjunto merengue en Europa en los últimos años se han producido cuando hemos tenido el nudo en la garganta y los jugadores han salido mentalizados de su “presumible” inferioridad.

Por allá por el año 1998, el Real Madrid se enfrentó a la Juventus de Turín en una eliminatoria en la que ni mucho menos era favorito, de hecho, como el conjunto transalpino había llegado a las dos últimas finales de la Liga de Campeones y casi todos los aficionados y analistas ajenos a la Casa Blanca veían casi imposible la victoria blanca. La temporada del Madrid ese año fue un desastre, alejados de la Liga, fuera de la Copa y llegó Mijatovic  y cambió la historia, se negó al destino que nos vaticinaban.

Luego en el año 2000, con Vicente Del Bosque como entrenador, el Madrid estaba haciendo una liga lamentable, recuerdo un partido perdido en el Bernabéu ante el Zaragoza por 1-5, haciendo una segunda liguilla de la Liga de Campeones (por aquellos tiempos se hacía) con dos enfrentamientos ante el Bayern Munich que terminaron con derrotas, en Chamartín por 2-4 y en Munich por 4-1, luego vino la eliminatoria contra el Manchester United pasamos a semifinales y caprichos del destino, nuestro rival fue de nuevo el equipo teutón. Con una eliminatoria calcada a la actual, el primer enfrentamiento fue en el Santiago Bernabéu con un 2-0 para nuestro equipo, y cuando los alemanes hablaban de arrasarnos en la vuelta y perdíamos 1-0, entre Savio y Anelka marcaron un gol que supuso nuestro pase a la final (2-1 resultado final) que posteriormente ganaríamos brillantemente al Valencia.  Los dirigentes del Bayern Munich se tiraban de los pelos diciendo que nos habían ganado tres partidos y que había perdido uno y que al final el campeón era el Madrid.

Luego en 2002, año de “La Novena”, hubo un enfrentamiento entre el Bayern Munich y el Real Madrid en cuartos de Final, en la ida en Munich, empezamos ganando en el minuto 11, gol de Geremi y en los últimos 10 minutos, el conjunto alemán, remontó en el marcador, 2-1. El jugador bosnio Hasan Salihamidžić hizo unas desafortunadas declaraciones que encendió a todo el madridismo, dijo que los jugadores del Madrid “se cagaban en los pantalones” y en la vuelta, nunca vi ambiente similar en el estadio, hasta los más piperos que os podáis imaginar actuaban como enfervorecidos aficionados con fe ciega en la victoria. El Madrid remontó la eliminatoria, 2-0 con goles de Iván Helguera y Guti. Ha sido uno de los mejores partidos que he vivido en mi vida, con asedio constante sobre la portería bávara. Creo que fue fundamental la actitud de los jugadores, el creer en ellos mismos.

Por supuesto que tiene opciones el Real Madrid ante Bayern Munich, pese a la alegría de Guardiola, pese a las desafortunadas declaraciones de Carletto dando el favoritismo al equipo alemán. El conjunto blanco es de esos rivales que nunca te quieres encontrar y más si lo dan por muerto porque en un descuido se te puede haber escapado la eliminatoria y sino que se lo digan al Atlético de Madrid en Copa. Por cierto, no me hubiese importado enfrentarme a ellos, los últimos tres partidos han tenido saldo favorable a nuestro favor.

Queda un mes y medio de competición y desde el próximo miércoles empiezan las verdaderas batallas y los madridistas confiamos en nuestro equipo, pero para ello le pedimos lo fundamental a nuestros jugadores: Luchar y no tener miedo, eso es inconcebible en un jugador del Real Madrid. Debe haber mucha unión entre aficionados, equipo y entorno para poder lograr algo que soñamos, un año con títulos.

Como mucho once partidos en tres competiciones y acabará la temporada, los jugadores deben ser ambiciosos y soñadores, están en el mejor club del mundo y los resultados finales disipan cualquier duda había durante la temporada, están con todas la ilusiones intactas y es posible, DEPENDE DE TODOS NOSOTROS, contagiemos a los jugadores de nuestra confianza, a su vez ellos deben olvidar lo pasado y pensar en las metas y seguro que al final tenemos muchos motivos para la felicidad.

Recordar, casi todos los títulos en España hay que ganárselos al Barça y casi todos los caminos para llegar a la final de la Liga de Campeones suelen pasar por Munich.

Un abrazo y Hala Madrid