Y
después de este fin de semana se ha puesto más difícil todavía
tener opciones en esta Liga, ¿Imposible? Pues salvo catástrofe del
FC Barcelona, si. ¿Qué queda? Cambiar el chip, olvidarse de
la distancia y volver a recordar lo que nos hizo un equipo temible y
respetado el pasado año, aprovechar nuestras virtudes y
maquillar nuestros defectos, es el mérito de todos los equipos que
quedan campeones.
Se
ha llegado a esta situación por muchos motivos, el principal, que no
se piensa en toda la semana en el siguiente partido, no están
centrados, jugadores, entrenador, en definitiva TODOS, esto no es una
cuestión de sacar el dardo y poner en la diana a D. José Mourinho,
que aunque también tiene su parte de culpa, no es el único
responsable de esto.
Al
Madrid le pasa esto con bastante frecuencia, en los últimos años,
es raro que se ganen dos Ligas consecutivas, el porqué del
asunto sería digno de psicoanálisis. Si nos fijamos,
desde la época de las cinco Ligas de la Quinta del Buitre, solo se
ha repetido título de Liga en una ocasión, y fue en un caso muy
raro, cuando Fabio Capello lleva al Madrid a conseguir un título
de Liga “la del Clavo Ardiendo” y es cesado y sustituido por
Bernd Schuster en la búsqueda de un juego más bonito (cosas que
tiene este equipo y su maldito entorno). Se producen numerosas
incorporaciones ese verano (Dudek, Metzelder, Pepe, Heinze, Drenthe,
Sneijder, Robben, Balboa, Saviola y Soldado)(*) . Siendo
objetivos, no era la continuidad de un proyecto, era un nuevo
proyecto, con entrenador incluido a pesar de haber sido campeones,
curioso.
Esto
nos lleva a meditar un poco, cuando se producen estos batacazos
¿Quién es el culpable? Lo habitual es señalar al
entrenador, es lo más sencillo y lo práctico, supone menor
desembolso económico, pero es una mala solución, ya que los
buenos jugadores rinden con todos los entrenadores que le pongan,
los Raúl, Zidane, Hierro, Redondo, Ronaldo, Xabi serían siempre
indiscutibles con el entrenador que le pusieran, el problema
es pensar que el niño será mejor estudiante porque se le cambie de
colegio o de profesor, falso, puede que algún cambio de
método ayude a mejorar, pero
quién no tiene hábitos, ni ve buenos ejemplos a su alrededor, es
difícil que lo logre. El quid de la cuestión en
el conjunto blanco es el compromiso del jugador con la entidad para
la que trabaja y da la impresión que las ultimas generaciones de
“pesos pesados” de este vestuario no son capaces de predicar con
el ejemplo, en algunos casos, o involucrar al resto en otros.
Me
llamó poderosamente la atención unas declaraciones de uno de
nuestros capitanes, Sergio Ramos, uno de los mejores centrales del
mundo (que actualmente no está en su mejor momento) en las que
después de empatar contra el Espanyol hacía referencia a que su
entrenador no debía tener quejas por el esfuerzo; no se trata de
que el "mister" esté contento con el esfuerzo, porque hoy está
Mou, mañana estará Pepito y pasado otro, se trata que los
jugadores sepan que no han podido hacer más por ganar, se trata de
estar todos unidos en la búsqueda de un objetivo y llevamos un año
de continuos desafíos, por no ponerse del lado de la entidad,
que es donde tienen que estar lo jugadores de peso, si Mou o “X”
sientan a Özil en busca de un mejor rendimiento, no es bueno ponerte
la camiseta del sustituido debajo para desafiar al gestor. Eso es
lo que, con perdón, nos diferencia del Barça, para sus capitanes
lo primero es su equipo y me duele un montón reconocerlo, allí
nadie se ha puesto la camiseta de Cesc, Villa y ahora Alves debajo
porque estén en la suplencia.
Cuando
las cosas van bien, todo es visto con buenos ojos, nada es
criticable, pero cuando no, el aficionado de a pie se cuestiona
si un jugador debe estar todo el día con presentaciones de libros,
inaugurando restaurantes, a bastantes kilómetros de Madrid (lo que
supone cansancio añadido). Como dice el refrán: “La mujer del
César no sólo tiene que serlo sino parecerlo”. A veces me
pregunto si los jugadores tienen entornos que les asesoren, desde
luego, en algunos casos no se ponen en la piel del seguidor.
Creo
que estas posturas cambiarán cuando en este equipo se mantenga el
cuerpo técnico, a pesar de los resultados y cuando, a pesar de haber
obtenido éxitos, se piense en renovar parte de la plantilla
para evitar que el jugador, inevitablemente, se acomode. A veces, es
bueno cambiar cromos, aunque el jugador que venga sea igual al que
tienes, el efecto motivación hace mucho. Y en el caso
particular de nuestro técnico José Mourinho, aprender: Fichar hombres de peso para su plantilla, pero para ello no tiene que
recurrir a viejas experiencias, porque puede que lo que antes fue
bueno, ahora no lo sea, y por último, a no entrar en guerras con
personas que no merecen la pena, se pierde tiempo y termina
descentrando al colectivo y a si mismo.
La
temporada tiene mucho que aportar todavía, y hay títulos donde las
posibilidades de éxito siguen intactas y en ellos se debe luchar a
muerte, aportando todo lo que se pueda, en equipo, sin fisuras, ES
LA CLAVE. Creo que se puede, es cuestión de
involucrarse, llegando al vestuario satisfecho con el trabajo
realizado, soy optimista, lo harán.
Un
abrazo y por supuesto, HALA MADRID
(*)
Según fuente "madridadas.com" plantilla 2007-2008
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